Medicina estética
La medicina estética es la práctica médico-quirúrgica que aplica las técnicas necesarias para la restauración, el mantenimiento y la promoción de la estética, la belleza y la salud, mediante el uso, principalmente, de técnicas no invasivas o mínimamente invasivas, que se realizan en un régimen ambulatorio (que no requiere el ingreso del paciente) y con anestesia tópica o local.
Este tipo de tratamientos estéticos deben ser realizadas por un personal médico debidamente cualificado, dada la creciente complejidad que entraña la práctica de las técnicas utilizadas, así como aquellas responsabilidades legales que puedan derivarse de estas actuaciones.
Hay que destacar que otra finalidad primordial de la medicina estética es realizar una auténtica medicina preventiva, debido a que una apariencia estética adecuada repercutirá en un mayor sentimiento de bienestar del paciente y, por tanto, en su salud general
- Endocrinología estética: son tratamientos relacionados con la celulitis y el metabolismo, el sobrepeso…
- Dermatología estética: centrado en tratamientos frente al envejecimiento de la piel. También trabaja aspectos como la flacidez, el tratamiento de arañas vasculares, eliminación de tatuajes, etc.
- Fleboestética: se ocupa del tratamiento de las varices
Los beneficios de la medicina estética son muchos y esa es la razón por la que cada vez gana más adeptos y aumenta su popularidad.
Veamos algunos de esos beneficios:
- Mejora la autoestima. La mayor parte de pacientes que se someten a un tratamiento de medicina estética buscan acabar con un complejo físico. Esta es una manera sencilla y poco invasiva de acabar con ellos y ganar calidad de vida.
- Métodos no invasivos y no permanentes. En la cirugía estética los métodos son irreversibles y permanentes, mientras en la medicina estética siempre podemos volver al estado original si no estamos satisfechos con el resultado.
- Procedimientos cortos. La mayoría de los tratamientos de medicina estética son rápidamente efectivos, por lo que el tiempo de tratamiento no suele prolongarse demasiado en el tiempo.
- Recuperación corta. Al ser tratamientos no invasivos, el tiempo de recuperación no suele ser largo. Generalmente en 24 h se puede retomar la rutina habitual.
- Resultados. Los tratamientos son generalmente muy efectivos, enseguida podemos observar los resultados y estos, además, son bastante duraderos.
- TRATAMIENTO CON TOXINA BOTULÍNICA
Este tratamiento está indicado para hombres y mujeres de cualquier edad que deseen atenuar las arrugas de su rostro. Se trata de una toxina que, inyectada en puntos estratégicos consigue relajar la musculatura con el objetivo de prevenir y atenuar arrugas faciales.
En cuanto a sus áreas de aplicación, la toxina botulínica está diseñada para tratar estas tres áreas faciales :
- Patas de gallo alrededor del ojo (Arrugas periorbitarias).
- Líneas del entrecejo (Arrugas del entrecejo).
- Líneas horizontales de la frente (Arrugas frontales).
Si este tratamiento antienvejecimiento es aplicado por un buen profesional, mantendrás el movimiento natural de tu rostro, pero lograrás prevenir las contracciones musculares que crean esas arrugas no deseadas.
- TRATAMIENTO DE RELLENO CON ÁCIDO HIALURÓNICO
El relleno facial con ácido hialurónico es uno de los tratamientos de medicina estética más populares y seguros. Tiene por objetivo:
- Restaurar la pérdida de volumen que sufre nuestro rostro con el paso del tiempo
- Modificar algunas características del rostro del individuo para hacerlo más atractivo y juvenil
El tratamiento no requiere cuidados especiales ni tampoco un periodo de baja. Puede generar una mínima inflamación y en caso de que aparezca algún moratón por los pinchazos, se resuelve a los 7 días siguientes. Además, no será nada grave que no pueda disimularse con un poco de maquillaje.
Beneficios:
- Elimina arrugas
- Recupera pérdida de volúmenes
- Armoniza tus rasgos
- Rejuvenece y aumenta el atractivo
- Elimina los rasgos de cansancio y tristeza
Qué zonas podemos mejorar con el ácido hialurónico?: Labios, pómulos, surco nasogeniano, marcación mandibular, mentón, rinomodelación y armonización facial global.
- TRATAMIENTO CON INDUCTORES DE COLÁGENO
Los inductores de colágeno natural son productos que se inyectan para activar la producción natural de esta proteína que se encuentra sobre todo en los huesos y en la piel.
Conocidos también como hilos líquidos dada la tensión que consiguen de la piel tratada.
El efecto suele ser inmediato y muy satisfactorio, aunque el resultado final se observa transcurridos unos dos o tres meses y perdura hasta un año después del tratamiento.
- HILOS TENSORES
Mediante la aplicación de hilos tensores se trata de reubicar los tejidos de la mejilla y el reborde mandibular que con los años se van descolgando. Este procedimiento da lugar a un ligero estiramiento de la piel hacia atrás, y, por tanto, el rostro luce más firme y rejuvenecido de una forma muy natural.
Además de estirar la piel, los hilos tensores combaten el envejecimiento de otra manera: provocando una respuesta en el cuerpo que hace que este envíe grandes cantidades de colágeno a las zonas tratadas. El colágeno contribuye a mantener la piel voluminosa y flexible
- MESOTERAPIA
La mesoterapia facial es un procedimiento muy poco invasivo que consiste en aplicar unas inyecciones en la capa media de la piel (dermis). Mediante la administración de sustancias nutritivas y revitalizantes, tales como ácido hialurónico, vitaminas y antioxidantes, la piel recibe un impulso de energía, además de los siguientes beneficios:
- Aumento del contenido de hidratación
- Aspecto más luminoso, firme y saludable
- Nutrición, revitalización e hidratación de la piel en profundidad
- Resultados visibles después de la primera sesión
Un peeling consiste en la aplicación de diferentes activos o sustancias químicas para lograr la eliminación de las células muertas de la piel, dejando paso a una piel nueva y regenerada, una tez más lisa y suave, con menos imperfecciones.
El peeling químico actúa en los niveles más profundos de la epidermis, incluso dermis y debe ser realizado por un médico experto, que optará por el uso de una sustancia determinada en función del tipo de piel y del resultado que se desea obtener.
Este tipo de tratamiento se realiza principalmente para:
- Aportar más luminosidad e hidratación
- Tratar imperfecciones como cicatrices de acné y manchas solares
- Atenuar arrugas finas y alteraciones de la textura y/o uniformidad del tono de la piel